12 Remedios naturales para la endometriosis

La endometriosis es una enfermedad ginecológica con síntomas como dolor abdominal, sangrados y problemas sexuales. Algunos remedios naturales incluyen fibra, Dong Quai, omega 3 y reducir alimentos pro-inflamatorios.

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La endometriosis es una enfermedad ginecológica con síntomas como dolor abdominal, sangrados y problemas sexuales. Algunos remedios naturales incluyen fibra, Dong Quai, omega 3 y reducir alimentos pro-inflamatorios.

¿Conoces los síntomas de la endometriosis? En nuestro artículo te los contamos, así como remedios para esta enfermedad ginecológica.La endometriosis se define como el crecimiento del endometrio (membrana mucosa que recubre la cavidad del útero) fuera de la cavidad uterina. En especial crece en los ovarios, trompas de falopio, vejiga y otras zonas de la cavidad abdominal.El tejido endometrial sigue igualmente respondiendo a los cambios hormonales. Existen diferentes grados según la profundidad, siendo para el diagnóstico definitivo una laparoscopia.Normalmente se diagnostica entre los 25 y los 35 años, pero probablemente se inicie alrededor de la primera menstruación de forma regular.

Síntomas

Los síntomas más frecuentes de la endometriosis son:

  • Dismenorrea
  • Sangrados
  • Dolor abdominal todo el ciclo
  • Dolor en las relaciones sexuales
  • Dolores lumbares
  • Dolor al orinar
  • Dolor irradiado el hombro
  • Náuseas
  • Vómitos

Esto lleva a muchas de las mujeres que lo padecen a estados depresivos, ansiedad, alteraciones del sueño, dependencia a los analgésicos, problemas sexuales con las parejas y absentismo escolar/laboral por estrés.Además, es una de las causas más común de infertilidad en mujeres en edad fértil.Los remedios naturales básicos para el tratamiento de la endometriosis, se dirigen a disminuir los estrógenos; para mejorar el equilibrio hormonal y disminuir el dolor.

Remedios naturales

  1. Fibra: consumir una alimentación más rica en fibra
  2. Dong Quai o ginseng hembra: esta planta se ha utilizado durante siglos en la medicina tradicional china para aliviar y combatir trastornos ginecológicos, como la endometriosis, ya que contiene fitoestrógenos naturales que actúan como reguladores hormonales femeninos.
  3. Gluten: eliminar el gluten de la dieta ya que se asocia a mayor dolor abdominal.
  4. Reducir alimentos pro-inflamatorios*: como azúcares, cafeína, carnes rojas, pollo, aceite de girasol, aceite de maíz, atún rojo, leche de vaca, soja, margarinas, harinas refinadas, comida procesada (aditivos, colorantes).
  5. Omega 3: incorporar varias veces en semana alimentos ricos en omega 3 (pescado azul, aceite de lino) y suplementar con omega 3.
  6. Omega 6: suplementar con omega 6 en forma de perlas de aceite de onagra o aceite de borraja
  7. Fermentados: regenerar la flora intestinal consumiendo a diario fermentos (pickles, chucrut, kimchi), té kombucha, kéfir de cabra, o suplementar con probióticos mínimo 21 días.
  8. Fitoestrógenos naturales:consumir fitoestrógenos naturales para corregir el desequilibrio hormonal. Como el ajo, arroz integral, avellanas, avena sin gluten, bayas, ciruelas, coco, coles, hinojo, legumbres, manzanas, remolacha, semillas de lino y sésamo, zanahorias.
  9. Ejercicio físico moderado: caminar 2.5 horas a la semana a un paso rápido, el ejercicio físico moderado ayuda a regular tus hormonas.
  10. Vitamina C: tomar a diario un suplemento de Vitamina C para ayudar a disminuir los sangrados y los dolores cólicos.
  11. Hacer una depuración hepática: los estrógenos se eliminan y metabolizan vía hepática, con lo que debemos ayudar con plantas amargas como: boldo, fumaria, alcachofera, diente de león, ortiga verde, cardo mariano. Por supuesto hay que eliminar el alcohol.
  12. Flores de Bach: apoyarse en una terapia emocional con flores de Bach, para tratar el insomnio, sensación de tristeza, ansiedad, stress, en parte derivados de los problemas añadidos de infertilidad.

*Si se consumen esporádicamente lácteos, carne roja y pollo, trata que sean de procedencia ecológica y sin grasas, ya que justo es en las grasas (la piel) donde se acumulan las toxinas y los estrógenos.